Los enredos económicos en el IESS Esmeraldas

PANORÁMICA. El Hospital del IESS en Esmeraldas para su operatividad depende de varios contratos, pero quienes prestan el servicio se quedan por el no pago.
PANORÁMICA. El Hospital del IESS en Esmeraldas para su operatividad depende de varios contratos, pero quienes prestan el servicio se quedan por el no pago.

Contraloría y Fiscalía solicitaron a la administración información para investigar compras con dinero público.

En enero del 2019 los directivos del IESS en Esmeraldas pagaron 90.749 dólares, por 238,88 metros cuadrados de “pisos dialéctico, acanalados antideslizantes en rubacel alto tráfico con logotipos”, es decir alfombras cuando se necesitaban medicamentos en la farmacia.

Diario La Hora, cotizando con proveedores del mismo producto, precisó que el valor máximo a invertir era de 22.693 dólares, debido a que cada metro cuadrado estaba en 95 dólares, según la cotización virtual dada por ‘Alfombras, rodapiés, publicitarias con logotipo Ecuador’, es decir la diferencia entre lo contratado y lo cotizado, es de 68.056 dólares, equivalente a cuatro veces más del costo a pagar por el IESS.

Los proveedores exigieron el 50% del dinero contratado, pero un fallo judicial determinó sobreprecios e impidió que la casa de salud pague lo adquirido, pero el producto sigue entre los pasillos de la casa de salud.

6 años impagos

Otra obra que se hizo en el IESS y no se pagó fue la contratada en 2014 para impermeabilizar la loza de la terraza que ponía en riesgo la bioseguridad de los quirófanos, debido a que habían filtraciones de agua lluvia. También se repotenció el sistema hidráulico.

Los del Seguro y la contratista firmaron el Contrato No 007, por 318 mil 568 dólares. El tema tomó vigencia el 5 de marzo de 2020 cuando se notifica del incumplimiento de pago al exdirector General del IESS, Paúl Granda, al presidente de la Comisión de Ética del IESS, Fernando Pauta y al coordinador Nacional de la Comisión Anticorrupción, Germán Rodas.

El excontratista Wagner Velásquez Solórzano en su delación dice que, “como ciudadano es mi deber denunciar aquellos actos arbitrarios en contratos pequeños de los que padecemos los contratistas del Estado, como en mi caso particular, en donde he padecido chantaje y abuso de poder, refiriéndome específicamente a los mandos medios (funcionarios públicos)”.

Y precisa que el 19 de mayo del 2015 el Fiscalizador de la obra confirma que se cumplió con el contrato. El 29 de octubre de ese año, la Notaría Quinta de Esmeraldas certifica la recepción definitiva de la obra hospitalaria de la que se adeuda 147 mil 273 dólares del capital y 60.573 dólares de intereses, por los 1.587 días de retrasos en el pago que debió hacerse 10 días después de su entrega.

¿Dónde está el dinero?

Tras un convenio de pago firmado el 17 de diciembre del 2018 entre las partes, se asigna el dinero por haberse impermeabilizado la loza de la terraza que ponía en riesgo la bioseguridad de los quirófanos.

Al interior del IESS por ahora decidieron no pronunciarse sobre estos temas, solo se conoció extraoficialmente que la razón para no pagar la deuda sería de que en los archivos de la institución no habría evidencia del Contrato No 007 que presenta el contratista y que más bien, sería solo un acuerdo de palabra con los administradores de la época.

El excontratista difiere con eso, argumentando que de ser así, no hubiese recibido los anticipos; la Contraloría en su examen especial habría fallado en contra de la obra y el Fiscalizador, con fecha 29 de agosto del 2017, no hubiese mandado al Director del IESS en esa época, el documento en el que dice: “adjunto al presente la documentación relativa al Contrato 007…”

Bolsas y mascarillas

A la lista de incumplimientos se sumarían también la de otro contratista que en 2018 también hizo un trabajo para la institución y no se le pagó, por esa razón siguió la acción legal.

Con la vigente Emergencia Sanitaria en el IESS Esmeraldas se hicieron dos compras que ascienden a 35.088 dólares. Para adquirir 5.615 respiradores KN95 se usaron 30.888, pagando 5,50 dólares por cada una a una a una empresa de Rocafuerte-Manabí. En búsqueda que hizo La Hora de proveedores en internet, el mismo producto se oferta en 3,99 dólares.

La segunda compra se hace con 4.200 dólares. Con ese monto se traen 100 bolsas para cadáveres, las que tendrían un valor de 28 por unidad, mientras que en la red se la ofertan a 22 dólares. Los que vendieron, según el contrato firmado, el 30 de abril, están en la ciudad de Guayaquil.

La venia para adquirir los dos productos es la declaratoria de emergencia que se dispuso el 17 de marzo en el IESS por medio de la Resolución Administrativa No IESS-DG-AL-2020-32HE “para mitigar prevenir y atender los efectos del coronavirus”.