Mucha gente asocia la extorsión con la delincuencia organizada, los secuestros y otras formas de crimen violento. Sin embargo, la palabra «extorsión» abarca una amplia gama de actividades: en algunos casos, las empresas pueden ser responsables de extorsión si abusan de su dominio del mercado y obligan a los clientes a pagar precios elevados. En otros casos, las empresas pueden ser responsables de extorsión si se confabulan con sus competidores o proveedores para fijar los precios. En otro caso, los individuos pueden ser responsables de extorsión si amenazan a una pareja o ex pareja para recibir dinero o bienes. La cuestión clave es si el autor indujo el miedo mediante amenazas de violencia o algún otro medio. Este artículo explora cómo se trata la extorsión en Ecuador; cuáles son las leyes y las penas relativas a la extorsión; y qué debe hacer usted si ha sido amenazado con una extorsión.
¿Qué es la extorsión en Ecuador?
Para determinar si hubo o no un acto de extorsión, un tribunal examinará las intenciones y acciones del autor en cuestión. Si una persona amenazó a una víctima para inducirla a entregar dinero, bienes o servicios, y le causó mucho estrés o miedo, puede ser declarada culpable de extorsión. La ley puede tratar las amenazas hechas a los miembros de la familia y a los empleados de la misma manera que las amenazas hechas a los extraños. Algunos ejemplos de extorsión son:
- Amenazar con causar daños corporales: las amenazas de dañar el cuerpo de otra persona pueden considerarse un delito.
- Amenazar con causar daños a la propiedad: si una persona amenaza con dañar la propiedad de otra persona, puede ser acusada de extorsión.
- Amenazar con revelar información privada: si una persona amenaza con revelar información privada de otra persona, como tener una aventura, puede ser acusada de extorsión.
- Amenazar con denunciar a alguien a las autoridades gubernamentales: si una persona amenaza con denunciar a otra a las autoridades, como la policía o Hacienda, puede ser acusada de extorsión.
Sanciones por extorsión en Ecuador
Dependiendo de las circunstancias que rodean la extorsión, los tribunales pueden imponer cualquiera de las siguientes penas:
- Una pena de prisión de entre 2 y 10 años, así como una multa.
- Pena de prisión de entre 2 y 10 años, así como una multa, seguida de un periodo de prueba de 5 años.
- Una pena de prisión de entre 3 y 10 años, así como una multa.
- Una pena de prisión de entre 4 y 10 años, así como una multa, seguida de un periodo de libertad condicional de 5 años.
- Una pena de prisión de entre 4 y 10 años, así como una multa, seguida de un periodo de prueba de 5 años y la prohibición de trabajar en un campo relacionado.
- Una pena de prisión de entre 10 y 20 años, así como una multa.
Cómo combatir la extorsión en Ecuador
Dado que la extorsión es un delito grave, cualquier persona que haya sido amenazada de extorsión debe denunciar inmediatamente el incidente a la policía. Además, es aconsejable conservar todas las comunicaciones del extorsionador, ya que esto puede ayudar a las autoridades policiales a construir un caso más sólido contra el autor. Por último, es aconsejable buscar asesoramiento legal para determinar el mejor curso de acción. Sin embargo, las víctimas de extorsión deben ser conscientes de que la extorsión suele ser un delito recurrente. Una vez que una persona ha sido extorsionada una vez, es probable que vuelva a ser extorsionada en el futuro. Esto se debe a que los extorsionistas suelen preferir amenazar a sus parejas actuales o pasadas, ya que es más fácil obtener información sobre ellas. Por esta razón, las víctimas de extorsión deben tomar precauciones para no volver a ser extorsionadas, como cambiar su número de teléfono y utilizar un número no listado, así como cambiar su rutina diaria.
Protección contra el chantaje y la extorsión en Ecuador
Aunque la extorsión es un delito grave, las víctimas de la extorsión no tienen derecho automáticamente a la protección contra el chantaje. Esto se debe a que el chantaje difiere de la extorsión: en el chantaje, el autor amenaza con revelar información sobre la víctima, como por ejemplo tener una aventura, mientras que la extorsión implica una demanda de dinero o bienes. Para recibir protección contra el chantaje, las víctimas deben presentar una denuncia penal contra su autor. Las autoridades ecuatorianas determinarán si la denuncia cumple o no todos los requisitos: en caso afirmativo, emitirán una orden de protección contra el chantaje.
Conclusión
Aunque la extorsión se da en muchos países del mundo, es especialmente común en Ecuador. La cultura de impulso del país, que se refiere a la práctica de perseguir agresivamente los propios objetivos, puede llevar a las personas a utilizar amenazas de violencia para extorsionar a otros. Dicho esto, Ecuador también cuenta con sólidas leyes contra la extorsión, así como con eficaces organismos encargados de hacer cumplir la ley. Cualquier persona que haya sido amenazada de extorsión debe denunciar el incidente a la policía y considerar la posibilidad de obtener asesoramiento legal de un abogado. (DLH)